Derechos Humanos

Air Liquide respeta y promueve los derechos humanos en todas sus operaciones alrededor del mundo. Creemos firmemente que todas las personas deben ser tratadas con respeto y dignidad, y que las empresas deben desempeñar un papel en la protección de estos derechos fundamentales.

Air Liquide comparte los principios establecidos en la Declaración Universal de Derechos Humanos, la Declaración de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) sobre los Principios y Derechos Fundamentales en el Trabajo, las Directrices de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) para Empresas Multinacionales, los Principios Rectores sobre las Empresas y los Derechos Humanos de las Naciones Unidas (ONU) y es signatario del Pacto Mundial de la ONU.

Air Liquide apoya plenamente la protección de los derechos humanos, que incluyen, entre otros, salud, seguridad, no discriminación, libertad de opinión, expresión y asociación, trabajo en condiciones dignas y justas, prohibición del trabajo infantil y cualquier forma de esclavitud moderna, y el derecho al agua y al saneamiento.

Como parte de su compromiso con el respeto de los derechos humanos, Air Liquide ofrece a todos sus empleados condiciones laborales centradas en la seguridad en el lugar de trabajo, el respeto a las personas y la ausencia de cualquier tipo de discriminación. Air Liquide promueve la diversidad y la igualdad de oportunidades para el desarrollo profesional independientemente, en particular, de etnia, género, edad, discapacidad u orientación sexual, y no tolera el acoso ni la discriminación. Air Liquide apoya y promueve un lugar de trabajo libre de cualquier forma de acoso, incluyendo bullying, acoso sexual, violencia o cualquier acción que cree un ambiente laboral amenazante.

Air Liquide espera que sus socios comerciales (contratistas, proveedores, distribuidores, consultores, etc.) respeten los derechos humanos fundamentales. De acuerdo con estos compromisos y los Principios de Acción del Grupo, el compromiso de sus proveedores de adherirse al Código de Conducta para Proveedores de Air Liquide y al Código de Conducta del Grupo es un requisito previo para brindar servicios a Air Liquide.

En el desarrollo de sus actividades, Air Liquide presta atención a posibles factores agravantes que pueden aumentar el riesgo de impactos negativos sobre los derechos humanos en ciertos países o áreas del negocio, como la injusticia debido a la corrupción, los contextos afectados por conflictos, la presencia de grupos más vulnerables entre las personas potencialmente afectadas (por ejemplo, mujeres, niños y jóvenes, comunidades locales incluyendo pueblos indígenas, trabajadores migrantes, personas con discapacidad, personas LGBTQ+, minorías étnicas, religiosas o culturales).

Air Liquide desarrolló un proceso de debida diligencia en derechos humanos de acuerdo con la Ley francesa de Deber de Vigilancia Corporativa. Se basa en los principios defendidos por estándares internacionales como los Principios Rectores sobre las Empresas y los Derechos Humanos de las Naciones Unidas (UNGP) y las Directrices de la OCDE para la Debida Diligencia en la Conducta Empresarial Responsable. Air Liquide divulga las medidas para identificar los riesgos y prevenir impactos adversos graves sobre los derechos humanos, la salud, la seguridad y el medio ambiente en su Plan de Vigilancia anual. Obtenga más información en nuestra página de Plan de Vigilancia.

EthiCall, el sistema de denuncia de irregularidades del Grupo, está disponible para cualquier persona, ya sea interna o externa. Permite a cualquier persona que tenga conocimiento directo de un comportamiento inapropiado denunciar confidencialmente cualquier incidente relacionado con los derechos humanos. Los colaboradores y partes interesadas de Airgas (empresa adquirida en 2016) también pueden utilizar EthicsPoint para realizar una denuncia. El Grupo Air Liquide se compromete a tomar todas las medidas adecuadas para proteger al denunciante, incluso contra cualquier medida de represalia. Obtenga más información sobre este sistema de denuncia en nuestra página de Ética.

Air Liquide también tiene en cuenta los temas que pueden ser obstáculos importantes para la protección y el respeto de los Derechos Humanos. En lo que respecta a la corrupción, los mecanismos internacionales de derechos humanos consideran cada vez más, el impacto negativo de la corrupción en el ejercicio de los derechos humanos. Para prevenir y luchar contra las prácticas corruptas, Air Liquide ha formalizado un Código de Conducta Anticorrupción a disposición de todas las entidades y disponible en la página web.

Como empresa responsable, Air Liquide reconoce la importancia y la urgencia de abordar los problemas climáticos. El cambio climático nos preocupa a todos, por sus efectos negativos en la vida, el medio ambiente y los derechos humanos, en particular para las poblaciones que ya se encuentran en una situación de vulnerabilidad. 

Las emisiones de gases de efecto invernadero y los fenómenos meteorológicos excepcionales relacionados con el cambio climático pueden afectar a las personas. En este contexto, el Grupo divulga en su Plan de Vigilancia acciones para prevenir y mitigar los riesgos climáticos relacionados con:

• El mantenimiento de la empleabilidad de sus empleados, dada la implementación de nuevas tecnologías y el desarrollo de nuevos mercados.
• El impacto del desarrollo masivo de energías renovables en las comunidades locales.
• El acceso a los recursos hídricos y su calidad.
• Daños a los sitios provocados por desastres naturales que podrían poner en peligro a los empleados y las comunidades vecinas.
• El deterioro de las condiciones de trabajo relacionado con los cambios a largo plazo en los modelos climáticos y el aumento de las temperaturas.

Air Liquide, a través de la implementación de sus objetivos climáticos, ha afirmado su voluntad de actuar en pos de la preservación del clima. En consonancia con el Acuerdo de París, y para hacer frente a la urgencia de tener en cuenta el cambio climático y la transición energética, Air Liquide se ha fijado la ambición de alcanzar la neutralidad de carbono en 2050, con dos grandes hitos intermedios: 

• Una reducción de las emisiones absolutas de CO2 para 2025
• Una reducción del -33% en sus emisiones de CO2 de alcance 1 y 2 para 2035, en comparación con la línea base de 2020

Air Liquide apoya plenamente la transición justa en su objetivo de neutralidad de carbono para 2050, acompañando el cambio social vinculado a la transición ecológica. La transición a una economía neutra en carbono también puede tener importantes implicaciones sociales y societarias que Air Liquide reconoce. Tiene que ser una transición justa, lo que significa que la transición a una economía más neutra en carbono y sostenible tiene que gestionarse bien teniendo en cuenta a todas las partes interesadas, como trabajadores, clientes, proveedores y comunidades locales, con el fin de minimizar los impactos negativos y potenciar los positivos. 

Obtenga más información sobre nuestra Declaración de Transición Justa